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jueves, 30 de octubre de 2008
isola } picamiel : entre tangos (2)
JOSE CARLOS GALLARDO
Yo nunca he sido así, tan alargado,
nocturna calle estrecha en que me sigo,
y nube sobre el hombro, como un líquido.
jose C Gallardo
Fallece en Buenos Aires el poeta granadino José Carlos Gallardo
Miembro de la generación de Versos al Aire Libre, el autor se exilió en 1957, aunque siempre llevó viva a su ciudad a través de los versos de cada uno de sus poemas
Mal día | |
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Hoy se me ha levantado el alma |
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Copyright © José Carlos Gallardo
Miembro de la llamada generación de Versos al Aire Libre, en la que también se encuentran poetas como Rafael Guillén, Ladrón de Guevara o Francisco Izquierdo, Gallardo escribió en sus 83 años más de sesenta libros entre poemas y novelas. En una de sus últimas publicaciones, Memorias en voz baja, plasmaba sus recuerdos a su tierra, propició precisamente el reencuentro con su ciudad. "Yo quería que este libro fuera como un certificado de procedencia granadina. Pretendo que las personas sepan que soy granadino por los cuatro costados", reivindicó hace tan sólo cuatro años en una entrevista a este diario.
Aunque Gallardo se marchó de Granada hace 51 años, nunca ocultó una profunda nostalgia de sus calles, amigos y bares. "Siempre que regreso aquí creo que es la última vez. Pero siempre regreso. Huí de aquí, de Granada; huí de allí, de Argentina, y huí de cualquier parte en la que me encontrase. Pero mis raíces siguen siendo granadinas, aunque ya también tengo algo de argentino. Yo considero que sigo estando a caballo en la línea del Ecuador entre Granada y no Latinoamérica, sino algún lugar que tengo en la mente", decía a menudo.
En la vida de Gallardo no han faltado anécdotas personales de todos los colores. A su llegada a Argentina, un grupo de poetas le tomó por franquista y trató de hacerle el vacío como escritor, lo que le obligó a leer en público sus poemas, que pronto todo el mundo tildó de "revolucionarios".
Partícipe en multitud de antologías de poesía en lengua española, Gallardo ha sido distinguido con numerosos reconocimientos a su obra, entre los que destacan el Premio del Ayuntamiento de Valencia por su libro Derrame cerebral o los premios de la Feria del libro de Almería, Ciudad de Granada, González de Lama o Ciudad de Jaén.
Escritores de una y otra orilla manifestaron ayer su profunda tristeza ante la muerte de José Carlos Gallardo. Con él se marcha una voz valiente y adelantada a su tiempo que se enfrentó a la distancia con la cercanía de alguien que nunca quiso renunciar a su identidad; aunque sus estremecedoras palabras permanecerán inalterables con el paso del tiempo.
miércoles, 29 de octubre de 2008
Te digo hay tantos porques para desconocerte...
Ciertamente la vida es un complejo estado
donde siempre algo te sorprende,
te deja parada con la boca abierta, mientras un viento
inesperado te da tres giros, te remonta y te tira, piernas para arriba.
Todo en un segundo.
Engaños, desengaños, si creíste?, sino? te ríes, pues
finalmente todo parece una comedia de enredos
tragicomica, donde los protagonistas somos los títeres de una función en la que pagamos entrada, pero no nos dan pochoclo, y encima nos cortan la luz para que no veamos la película que queremos ver...y en su lugar
entran jo dones bomberos para dejarnos helados con sus mangueras de agua...mientras otros sentados frente a la platea del televisor se ríen.
jaja, bueno así de funesta es la realidad a veces, por eso, mejor es andar y andar y reír todo lo que se pueda,
antes que llorar.
Así que mientras ando,
desconocidos como siempre digo..
las estrellas del cielo, me brillan, me sonríen..
y yo me rió con ellas.
picamiel
ELECTROTANGO : Isola /picamiel entre tangos
en espiral loca
cortando distancias...entre vos y yo.
Donde estas?
quiero abrazarte
con tres tajos
a su corazón insensato e impiadoso!!!
Alguien con nombre de Isla...
picamiel
2008
Chamuyando a..
te hizo un 3d
para marearnos entre tus luces
movimiento brutal, serpiente larga
que arrancas corazones
para toda la vida
Para que nombrarte?
si siempre estas subiendo
o bajando al río
a enjuagar tus broncas en el barro
de tus aguas que se van
pero siempre están volviendo
por esa ventana abierta
que remontamos
hasta el loco obelisco
que siempre es testigo
de como enajenamos al cielo.
picamiel
2008
estación de noctámbulos
donde cualquier día
parece sábado ...
Ascua de luces eléctricas
parecés el pecho de una bacana
por las muchas pedrerías
de tus lámparas.
Las puertas de tus cafés-conciertos
son altoparlantes impensados
de ande sale la transmisión de las orquestas
y la charla de los parroquianos ...
Caye de todo el mundo y de nadie
en la que siempre s´está de paso,
la gente cruza por tus aceras
siempre como bailando un tango,
tal es el apechugamiento
a que obliga tu estrechez
de salón de barrio.
Hay que ver cuántas tragedias
y cuánta risa por tus calzadas,
exposición de ruidos y de miserias
que por una ironía sarcástica
viene a ser, por sus oportunidades,
el "buen camino" de las yirantas...
Toda esa clase de gente
pulula por tus angostas veredas,
romería de artístas, curiosos y vivillos,
que a veces sos caye y otras veces sos feria...
Caye Corrientes:
sos un paseo de Julio Moderno y elegante;
si es que en verdá la función crea el órgano
¡vos sos el intestino Colón de Buenos Aires!.
Poema de Dante Linyera
es la que escucharia yo con ellas...
El susurro de un saludo
y que el final siempre es lo mismo:
darte cuenta que no has logrado nada,
que estas sola, o mas sola aun, en una multitud extraña, que no entiende nada...
esperas de perfil
y tras mucho escuchar sigo escuchando.
Sólo al final he descubierto
que no era lo importante la palabra esperada
sino la pose exacta del perfil
que marcaba mi sombra
sobre la lisa y muda indiferencia
de lo que la costumbre llama vida.
martes, 28 de octubre de 2008
Los Pobres Diablos
Héctor Negro
Sube la marea
en espiral loca
sube el humo de mi pucho
decantando,
cortando distancias...
y el rio
A Tuñon
la moneda de dos caras
RAÚL GONZALEZ TUÑÓN
Para nosotros fue Raúl, Juancito Caminador por siempre. Joven como nosotros lo éramos
entonces, poeta como nadie. Lúcido frecuentador del entresueño. Camarada tenaz de la
esperanza. Camarada Tuñón, como él se designó. Para nosotros maestro, amigo, hermano,
compinche de impensadas correrías por regiones azules.
Nos enseñó la rosa de los vientos, el otro lado de la estrella, la luna con gatillo, la aventura
del hombre por ser hombre. Cuando blindó la rosa, enarboló su fuego y derramó su poesía.
Un día, con su mano en nuestro hombro, nos señaló la ruta sin mentiras por donde va el
destino de los pueblos, la milicia poética al servicio del hombre. Y con él entendimos la
realidad y el sueño, la magia y la osadía, la odisea del canto insobornable.
Lleno de luz, de amor, de mundo, él fue aquel "violín del diablo" y el clown funambulesco
vagando por el bajo entre turbios barracones. Y el soñado París que nos alucinó desde su
asombro. Y fue los horizontes vastos y dolidos de un país que era nuestro y nos robaban.
Fue los mineros de Asturias, España(la República) desangrándose erguida.
Fue el solidario gesto contra toda injusticia, el canto por Moscú y sus abedules, su Coral
Corea, las viejas catedrales de Europa milenaria, la veleta y la antena, su barrio Once surero
Y aquel tango bailado en la vereda.
Ahora lo recuerdo como aquella tarde, llegando a su modesta casa de la calle Amenábar.
Pobre y de a pié, iluminado y mágico. Con mucho mundo y poca plata. Con su fe santa en
la Revolución. Llegando para reencontrarse con títeres y postales de lejanos países, con
cajitas de música y el barquito en la botella, con su compañera Nélida. Para traerme, junto
con su saludo, la voz de otro poeta nuevo que le arrimó otra metáfora feliz, el vaticinio del
triunfo de una distante causa popular...Y la cáustica piedad por los se sonrojaban ante una
poesía gestada entre el tumulto.
Por él, sin duda, fuimos un poco más poetas y jóvenes como él por mucho tiempo.
Fuimos un poco menos "nadie", más fieles y jugados por la causa del hombre.
Y aquel grupo "El Pan Duro", que fue nuestra fragua y que también fue un poco suyo,
repartió más sus migas(como semillas ágiles) y acometió distancias.
Por él no le temimos al complot del silencio y aprendimos que el rumor de la gente suele
gestar sonidos entrañables que nunca dejan de poblarnos.
¡Salud Raúl, Juancito Caminador, eterno habitante del país del futuro!
El alba que ya entonces presagiabas está más cerca, a pesar de todo.Y tiene más sentido
la poesía que viviste, escribiste y sembraste como una flor inextinguible
Cada poema tuyo es una llama más, una rosa de fuego derramada, un vendaval de polen.
Un viento de banderas...Raúl González Tuñón...Juancito Caminador...Raúl para nosotros.
Jóven como la aurora. Vivo como las esperanzas de tu pueblo. ¡Poeta como nadie!
…¡Maestro y hermano de nuestros balbuceos más puros…!
Héctor Negro
Ezra Pound, varios (1885-1972)
ENCARGO
Id, canciones mías, al solitario y al insatisfecho,
id también al desquiciado, al esclavo de las convenciones,
llevadles mi desprecio hacia sus opresores.
Id como una ola gigante de agua fría,
llevad mi desprecio por los opresores.
Hablad contra la opresión inconsciente,
hablad contra la tiranía de los que no tienen imaginación,
hablad contra las ataduras,
id a la burguesa que se está muriendo de tedio,
id a las mujeres de los barrios residenciales,
id a las repugnantemente casadas,
id a aquellas cuyo fracaso está oculto,
id a las emparejadas sin fortuna,
id a la esposa comprada,
id a la mujer comprometida.
Id a los que tienen una lujuria exquisita,
id a aquellos cuyos deseos exquisitos son frustrados,
id como una plaga contra el aburrimiento del mundo;
id con vuestro filo contra esto,
reforzad los sutiles cordones,
traed confianza a las algas y tentáculos del alma.
Id de manera amistosa,
id con palabras sinceras.
Ansiad el hallazgo de males nuevos y de un nuevo bien,
oponeos a todas las formas de opresión.
Id a quienes la mediana edad ha engordado,
a los que han perdido el interés.
Id a los adolescentes a quienes les asfixia la familia...
¡Oh, qué asqueroso resulta
ver tres generaciones reunidas bajo un mismo techo!
Es como un árbol viejo con retoños
y con algunas ramas podridas y cayéndose.
Salid y desafiad la opinión,
id contra este cautiverio vegetal de la sangre.
Id contra todas las clases de manos muertas.
EE.UU.
Con Usura
Con usura ningún hombre tiene una casa de buena
piedra
cada bloque pulido bien encajado
para que el dibujo pueda cubrir su cara,
con usura
ningún hombre tiene un paraíso pintado en la pared de
su iglesia
harpes et lutes
o donde virgen reciba mensaje
y halo se proyecte de la incisión,
con usura
ningún hombre ve a Gonzaga sus herederos y sus
concubinas
ninguna pintura es hecha para durar ni para vivir con
ella
sino que es hecha para vender y vender pronto
con usura, pecado contra natura,
tu pan es cada vez más de trapos viejos
seco es tu pan como papel,
sin trigo de montaña ni harina fuerte
con usura la línea se hace gruesa
con usura no hay clara demarcación
y ningún hombre puede hallar sitio para su morada.
El tallador de piedra es alejado de su piedra,
el tejedor alejado de su telar
CON USURA
no viene lana al mercado
la oveja no da ganancia con la usura
La usura es una morriña, la usura
mella la aguja en la mano de la doncella
y detiene la habilidad de la hilandera. Pietro Lombardo
no vino por usura
Duccio no vino por usura
ni Pier della Francesca; Zuan Bellin no por usura
ni fue ´La Calumniaª pintada.
No vino por usura Angélico; no vino Ambrogio Praedis,
No vino ninguna iglesia de piedra pulida firmada:
Adamo me fecit.
No por usura St.Trophine
No pur usura Saint Hilaire,
La usura ensarra el cincel
Ensarra el arte y el artesano
Roe el hilo en la rueca
Ninguna aprende a bordar oro en su bastidor;
El azur tiene un chancro por la usura; el cramoisi está
sin bordar
La esmeralda no encuentra su Henling
La usura asesina al niño en el vientre
Impide el galantear del muchacho
Ha traído parálisis al lecho, yace
entre la novia y el esposo.
EE.UU.
ella me exploraba con sus ojos.
y cuando me levanté para marcharme
sus dedos fueron como el tejido
de una servilleta japonesa de papel.
EE.UU.
Saliste de la noche
Con flores en las manos.
Vas a salir ahora del tumulto del mundo,
De la babel de lenguas que te nombra.
Yo que te vi rodeada de hechos primordiales,
Monté en cólera cuando te mencionaron
En oscuros callejones.
¡Cómo me gustaría que una ola fresca cubriera mi mente
Que el mundo se trocara en hoja seca,
O en un vilano al viento,
Para que yo pudiera encontrarte de nuevo
Sola!
EE.UU.
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| Reseña biográfica
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dice que no le mirara la cara!!!
mirando azulejos
no le veras la cara
ni al che de Galilea....
Al final te perdes lo mejor,
o tal vez, solo tal vez
tengas algun problema
muy serio
con su cara...
Serà que te recuerda algo?
No lavaré tus manos tiznadas de pasión y desenfreno.
Solo absorberé el aliento malicioso de lujuria que recorre tu cuerpo.
Y fundiré mi sudor al tuyo para reconocernos.
domingo, 26 de octubre de 2008
Arte que sana, forma, formas y el tiempo para viajar.
Una pequeña muestra de diferentes pinturas
en el transcurso del tiempo. Dicen mucho,
ademàs de introducirnos en otros paraisos
y bellezas. Nos hacen comprender y comprendernos.
Tal vez el Arte sea un refugio sanador tambièn.
picamiel
La estética de la forma es sólo posible por la ruptura procedente de la misma estética, pero entendida como totalidad de todo aquello que está proscrito por la forma. Y de esto depende en definitva si el arte es posible. El concepto de forma constituye la antítesis más tajante entre el arte y la vida empírica en la que su derecho a la existencia se ha convertido en incierto. Las posibilidades del arte son las mismas que las de la forma y no más. Su participación en la crisis del arte sale a la luz en manifestaciones como la de Lukács, según el cual en el arte moderno se ha sobrevalorado mucho la importancia de la forma. En este pronunciamiento banal está condensado tanto el inconsciente malestar ante el mundo del arte de ese conservador de la cultura que es Lukács como un concepto de forma que es inadecuado al arte. Sólo quien desconoce la forma como algo esencial, como la mediación hacia el contenido del arte puede caer en la trampa de afirmar que, en arte, se ha sobrevalorado la forma. Esta es la concordancia de las obras, sean los que sean sus antagonismos y rupturas, mediante los cuales toda obrea conseguida se separa de lo meramente existente. El concepto no reflejo de forma que se repite en cualquier gritería sobre el formalismo, contrapone la forma a lo versificado, compuesto, pintado como si fuera una estructura separable de ello. Así aparece ante el pensamiento como algo sobrepuesto, subjetivamente convencional, siendo así que sustancialmente la forma constituye algo unitario cuando no violenta lo conformado sino que se eleva a partir de ello. Y lo conformado, el contenido, no son objetos externos a la forma, sino los impulsos miméticos a los que el contenido arrastra hacia ese mundo de imágenes que es la forma. Los incontables y funestos equívocos en el concepto de la forma datan desde que ésta se descubrió como ubicua, lo cual condujo falsamente a denominar forma a todos y cada uno de los aspectos que son artísticos en el arte. También es estéril el concepto en esa generalización trivial que nada dice sino que en la obra de arte cualquier «materia» -bien sean los objetos intencionales o los materiales como el barro o los colores- es algo mediato, no algo sencillamente existente. Tampoco vale para nada determinar el concepto de forma como procedencia o marca del sujeto. Lo que, con razón, puede ser llamado forma en las obras de arte es tanto la plenitud de los desiderata entre los que se mueve la actividad subjetiva como el producto de esa actividad. Estéticamente la forma de las obras de arte es una determinación subjetiva y lo es esencialmente. Su lugar está precisamente allí donde la obra se ha separado del producto. Tampoco hay que buscarla en la ordenación de unos elementos previos, concepto quizá creado por la contemplación de la composición de un cuadro, antes de que el impresionismo acabara con él; el hecho de que, sin embargo, muchas obras precisamente las tenidas como clásicas, se hayan mostrado como tales ordenaciones ante una mirada insistente, es un argumento mortal contra el arte tradicional. Tampoco puede ser reducido el concepto de forma a relaciones matemáticas como a veces quiso entender la estética anterior, Zeising, por ejemplo. Tales relaciones, sea en cuanto principios explícitos como en el Renacimiento, sea en forma latente y copulados con concepciones místicas como a veces Bach, tienen su papel en la forma de proceder pero no son forma sino vehículos de la misma, medios para preformación de unos materiales considerados como caóticos y carentes de cualidades por el sujeto distanciado de ellos y vuelto sobre sí mismo. La coincidencia con el andamiaje matemático y todo lo emparentado con él es muy pequeña; puede percibirse esto, en tiempos más recientes, en la técnica dodecatónica que realmente da una forma previa a los materiales por medio de relaciones numéricas -series en las que no puede aparecer ningún tono antes de que aparezca el otro y que se permutan entre sí- Se hizo patente en seguida tal preformación no tenía como creadora de forma esa eficacia que esperaba el programa formulado por Erwin Stein, programa que no en vano llevaba el título de «Nuevos Principios de la Forma». El mismo Schöemberg distinguió mecánicamente entre la disposición dodecatónica y la composición en cuanto tal y acabó insatisfecho de su ingeniosa técnica precisamente por semejante distinción. La generación siguiente, que aceptó la diferencia entre la forma de proceder por series y la composición propiamente dicha, tuvo que pagar la integración no sólo al precio de una alienación musical, sino también al de una carencia de articulación que apenas se puede pensar como separada de la forma. Sucede como si la inmanencia de tales obras, simplemente abandonadas a sí mismas sin intervención, o los esfuerzos por llegar a oír a partir de lo heterogéneo tonalidades formales tuvieran un efecto retrospectivo que las convirtiera en obras en bruto, en auténticos torsos. En realidad las obras con mayor organización como método para la objetivación inmanente de la forma es realmente algo quimérico. Se podría clarificar su insuficiencia por el hecho de que sus esfuerzos se dan en unas fases en las que desaparece la tradicional evidencia de las formas y el artista no tiene ningún canon objetivo. Entonces echa mano a las matemáticas; unifica el estadio de la razón subjetiva en que se encuentra con la apariencia de objetividad según las categorías de universalidad y necesidad; en apariencia porque la organización, la relación recíproca de los momentos que constituye la forma, no procede de la figura específica y renuncia a la particularidad. Por esto precisamente la matematización se inclina hacia formas tradicionales, a la vez que las recusa como irracionales. En lugar de encarnar la fundamental legalidad del ser, aunque se explique a sí mismo como tal, el aspecto matemático del arte se esfuerza desesperadamente por garantizar su posibilidad en una situación histórica en que la objetividad de la forma es tan exigida como formada por el estado de la conciencia.
Extraído del libro "Teoría Estética" Editado por TaurusEl ojo y el dedo
El Arte podria hacernos comprender cosas que ignoramos
pero que nuestro interior habia ya captado.
Por eso le tendràn miedo algunos??
picamiel
Es indiscutible que el contenido de todos los momentos de la lógica artística o, más aún, que el ajuste de las obras de arte es lo que se puede llamar su forma. Sorprende lo poco que la estética ha reflejado esta categoría y hasta qué punto se la ha considerado como algo dado, sin problemas, al constituir lo diferencial del arte. La dificultad de llegar a ella con seguridad está condicionada por lo entrelazada que está cualquier forma estética con el contenido; no sólo hay que pensarla como contrapropuesta al contenido, sino precisamente por medio y a través de él, si es que no se la quiere sacrificar a ese abstraccionismo por el que la estética suele aliarse con el arte reaccionario. Asemás, el concepto de forma hasta Valéry, ha constituido el punto ciego de la estética porque todo arte está tan orientado hacia él que lo hace reacio a aceptar su aislamiento como momento singular. Aunque el arte no podría ser definido por ningún otro de sus momentos, tampoco se lo puede identificar sencillamente con la forma. Cada momento artístico puede negarse a sí mismo en ella; incluso la unidad estética, la idea de la forma, que en definitiva posibilitó la obra de arte como totalidad y autonomía. En las obras modernas muy desarrolladas la forma tiende a disociar su unidad bien en favor de la expresión, bien como crítica de la esencia afirmativa. La presencia de las formas abiertas ya se había dado mucho antes de la omnipresente crisis contemporánea. En Mozart hizo sus pruebas una clase de unidad que jugaba precisamente con la relación de la unidad. Yuxtaponiendo elementos relativamente disociados y llenos de contrastes hace sus malabarismos este compositor en el que, ante todo, se alaba la seguridad de la forma, siendo él mismo un virtuoso de su concepto. Tal confianza tenía en la fuerza formal que por así decir dejaba sueltas las riendas y desde la misma seguridad de la construcción dejaba paso a las tendencias centrífugas. En la vieja herencia tradicional la idea de la unidad como forma es tan inconmovible que puede soportar las mayores cargas mientras que en Beethoven, en quien la unidad ha perdido ya su sustancialidad por los ataques nominalistas, la tendencia hacia ella es mucho más rígida: es la que, a priori, está dando forma a lo múltiple y lo liga fuertemente con mayor triunfalismo. Hoy los artistas desearían resucitar esa unidad, pero señalando que las obras que se cree abiertas e inacabadas respecto de la planificación, necesariamente ganan algo así como una nueva unidad. Por lo general la teoría empareja forma con simetría, con repetición. No es necesario discutir que si se quiere explicar el concepto de forma por invariantes, se presentarían por un lado la igualdad y la repetición, pero también aparecerían sus contrarios, desigualdad, contraste, desarrollo. Pero con el establecimiento de tales categorías habríamos conseguido poco. Los análisis musicales nos conducen al hecho de que aún en las obras más sueltas y más enemigas de la repetición existen ciertas semejanzas, algunas partes se corresponden con otras en ciertas características y sólo por la relación de tal identidad se puede realizar la pretendida falta de identidad; sin ningún tipo de igualdad el caos sería una constante. Pero lo que supera decididamente cualquier constancia invariante es la diferencia que hay entre la relación manifiesta, ordenada desde fuera y sin mediación de factores específicos, y la inevitable determinación de lo desigual por un resto de igualdad. Un concepto de forma que por simetría con lo invariable prescinda de lo anterior, no está muy lejos de esa brutal fraseología que, en alemán, no se espanta de la expresión «plenificado en su forma» (formovollendet). Como la estética siempre presupone el concepto de forma, su centro, en el hecho del arte, necesita de todo su esfuerzo para llegar a pensarlo. Si no quiere enredarse en tautologías ha de orientarse hacia aquello que no es inmanente al concepto de forma aun sabiendo que ese concepto, estéticamente, no quiere decir nada fuera de sí mismo.
Forma Extraído del libro "Teoría Estética" Editado por Taurus, 1971