

Te miro a los ojos al despertar Y no encuentro la puerta de tu corazón Ya no son mis manos esas montañas y bosques Que se llenaban de veranos feroces Y sueños locos al mirarte Pues ahora soy incapaz de pronunciar tu nombre Hoy mi corazón es tan transparente Como todas tus mentiras silenciosas Y tu boca ya no podrá desnudarse Con mi luz Con mis risas de niño grande
Antonio Marín Segovia
13 de marzo de 2006
Me siento perfecto cuando tus manos me miran Y entienden mi tristeza De río joven Es bueno poder sentir tu calor Y vivir dentro de esa mirada Suavemente feroz Es bueno crecer contigo Cada vez que me olvidas Cada vez que me entiendes Y soy real y montaña conquistada Cuando tu boca me nombra Me siento perfecto Cuando tus manos me miran Y entienden mi tristeza de río joven Sí Realmente necesito decir tu nombre en voz alta Y comer en tu vientre en todas las estrellas cansadas Que traviesos ángeles esconden Hoy quiero Caminar dentro de tus sueños Para creer que somos tan grandes Tan eternos Como una sonrisa O como el pan de mediodía Y el vino que baña nuestros rostros Y es bueno no tener palabras Ni silencios Ni refugios Para poder sentirte entera Seguramente eres libre siempre Y tan invisible y necesaria Como es la luz del verano
Antonio Marín Segovia
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